Consejos para casarse como turista en Estados Unidos

Si està ¡ en Estados Unidos como turista y està ¡ considerando la posibilidad de casarse y le asaltan las dudas sobre si puede hacerlo, la respuesta es que sà ­, es posible casarse con una visa de turista en Estados Unidos. Otra cosa muy distinta es poder quedarse legalmente en el paà ­s y conseguir la tarjeta de residencia por matrimonio. Si esto es lo que se pretende, es altamente recomendable leer con mà ¡xima atencià ³n este artà ­culo y evitar errores que pueden costar muy caro. En este artà ­culo se explica cuà ¡les pueden ser los problemas para los extranjeros que entran a Estados Unidos con una visa de turista y se casan con un ciudadano americano. Asimismo, se hace referencia a las opciones legales para evitar problemas.  ¿Quià ©nes son turistas desde el punto de vista migratorio? Esta pregunta puede parecer una tonterà ­a, pero no lo es. Son turistas los que entraron con esa visa, pero tambià ©n  los espaà ±oles y los chilenos que viajan a Estados Unidos como turistas y sin visa, por formar parte del grupo de paà ­ses para los que rige el Programa de Exencià ³n de Visados. En estos casos espaà ±oles y chilenos, en la mayorà ­a de los casos, solamente  tienen una autorizacià ³n electrà ³nica que se conoce como ESTA que les permite estar en el paà ­s por un mà ¡ximo de 90 dà ­as, que jamà ¡s se pueden extender.   Tanto los turistas con visa como los que sà ³lo tienen la ESTA pueden casarse en Estados Unidos.   Otra cosa distinta es que el matrimonio, à ºnicamente por sà ­ mismo, produzca efectos migratorios. Requerimientos civiles  para casarse y que el matrimonio tenga efectos migratorios Hay que cumplir con los requisitos del estado o, en su caso, el condado o municipalidad  en el que se celebra el matrimonio.   Destacar que en todos los estados de Estados Unidos asà ­ como en los territorios que componen la Commonwealth -como por ejemplo Puerto Rico-  es legal el matrimonio entre personas del mismo sexo. Por otra parte, en ninguno està ¡ permitido la bigamia, es decir, estar casado al mismo tiempo con mà ¡s de una persona. Asuntos y precauciones migratorias que deben tenerse en cuenta En teorà ­a, cuando un extranjero que està ¡ en Estados Unidos como turista y un ciudadano estadounidense contraen matrimonio, el cà ³nyuge extranjero deberà ­a salir del paà ­s antes de que expire su autorizacià ³n para quedarse legalmente. A continuacià ³n, si asà ­ lo desean, el ciudadano pedirà ­a a su cà ³nyuge mediante un procedimiento consular y mientras esperar fuera de los Estados Unidos a que llegue el  momento de la entrevista en el consulado y se obtenga la visa de inmigrante. Pero lo cierto es que en la prà ¡ctica en muchos casos eso no ocurre asà ­ y el cà ³nyuge extranjero decide quedarse en los Estados Unidos mientras se tramita los papeles. Para evitar problemas migratorios muy serios es aconsejable tener en cuenta la siguiente informacià ³n: Primero: evitar problemas relacionados con la intencià ³n, o lo que en inglà ©s se conoce como intent.   Cuando persona que entra en Estados Unidos como turista debe tener necesariamente esa intencià ³n: pasear por el paà ­s y antes de que se le acabe la visa o el periodo de estancia legal debe regresar a su paà ­s. Y nunca debe ingresar al paà ­s con la intencià ³n de contraer matrimonio. Cosa muy distinta y que puede admitirse es que dos personas decidan en un instante casarse. Es decir, que cuando el extranjero llegà ³ a USA no tenà ­a esa idea pero el amor a veces es impulsivo y se puede cambiar de opinià ³n. Pero,  ¿cà ³mo evitar problemas y estar en condicià ³n de poder demostrar que la intencià ³n de casarse no existà ­a antes de entrar al paà ­s? Hasta hace poco, eso se garantizaba  siguiendo la regla 30/60 que una norma del Departamento de Estado que el USCIS solà ­a  aplicar en los casos de matrimonios entre extranjeros y ciudadanos americanos y que deberà ­a entenderse asà ­: Cuando se pedà ­a  un ajuste de estatus por matrimonio en los 30 dà ­as siguientes a la llegada del extranjero, se presumà ­a que se estaba actuando de mala fe. En otras palabras, que su intencià ³n fue siempre casarse y que, por lo tanto, no debà ­a concederse la peticià ³n de  ajuste de estatus. Cuando se solicitaba entre el dà ­a 31 y el 60 habà ­a y una fuerte sospecha de que puede haber habido una intencià ³n de contraer matrimonio desde el principio. En esos casos habà ­a que esperar un examen muy exhaustivo del matrimonio y de sus intenciones. Sin embargo, la cantidad de dà ­as ha cambiado recientemente con la Administracià ³n Trump. Segà ºn un comunicado del Departamento de Estado, se considerarà ¡ salvo raras excepciones que los matrimonios con el objetivo de pedir un ajuste de estatus celebrados en los 90 dà ­as siguientes al ingreso a Estados Unidos son un fraude de ley. Y la consecuencia de ello es que no se aprobarà ¡ el ajuste de estatus, no se renovarà ¡ la visa, que podrà ¡ ser cancelada, no se aprobarà ¡ ningà ºn cambio de visa y, si el extranjero permanece en Estados Unidos, se convierte en elegible para la deportacià ³n. Este es un cambio importante y muy serio. Es importante entender que no importa que familiares y amigos no tuvieron problemas por este asunto en el pasado. Las reglas han cambiado y lo que importa es lo que se aplica en estos momentos. Segundo: tener claro el proceso de  residencia por matrimonio  y todos los requerimientos.  La tramitacià ³n costa bà ¡sicamente de dos partes. Por un lado la peticià ³n per se y por otra el ajuste de estatus. Pero antes de comenzar asegurarse de que se cumplen requerimientos bà ¡sicos como, por ejemplo, el de ingresos mà ­nimos para patrocinar. Tercero: es muy importante tener en cuenta que mientras dura este proceso, la estancia del cà ³nyuge extranjero probablemente se encuentre por varios meses no cubierta desde el punto de vista migratorio por una visa o por la ESTA. Es por ello que no se debe salir de Estados Unidos. Lo recomendable es permanecer dentro del paà ­s o bien hasta que reciba la tarjeta de residente o bien un permiso que se conoce como advance parole. Si sale antes o sin esa autorizacià ³n, se arriesga a que cuando quiera regresar se le prohà ­ba la entrada en la frontera de EEUU. Incluso es recomendable consultar con un abogado si conviene salir aà ºn teniendo el advance parole. Cuarto: tener muy claro que en este artà ­culo siempre se habla de matrimonio con un ciudadano americano y nunca del caso de una pareja conformada por extranjero turista y residente permanente. Y es que estos casos son muy diferentes ya que si el turista se queda sin la proteccià ³n legal de la visa o de la ESTA porque permanece en el paà ­s mà ¡s tiempo del permitido no va a poder ajustar su estatus y, por lo tanto, no va a poder obtener la residencia dentro de los Estados Unidos. Esta es una gran diferencia desde el punto de vista migratorio. Quinto: tener en cuenta que siempre se habla de turista que ingresà ³ con visa o con ESTA. Nada de lo que dice este artà ­culo aplica a los migrantes que llegaron a los Estados Unidos sin pasar por un control migratorio, es decir, aquellos que ingresaron ilegalmente por la frontera. Estas personas no pueden nunca ajustar su estatus por matrimonio. Sexto: no olvidar que los problemas pueden comenzar en el control migratorio. Es perfectamente posible que el oficial de Inmigracià ³n en la frontera de Estados Unidos (puerto, aeropuerto o frontera terrestre) prohà ­ba la entrada de un extranjero con una visa de turista cuando sospeche que su intencià ³n es venir al paà ­s para casarse. El oficial de Inmigracià ³n siempre tienen una pequeà ±a conversacià ³n con la persona que procesa (y se recomienda no mentir) y  puede llegar a la conclusià ³n de que viene a casarse. Ademà ¡s, pueden abrir el equipaje y descubrir cosas sospechosas como el traje de novia, regalos, muchà ­simas maletas para un viaje en teorà ­a de sà ³lo un par de semanas, etc. En estos casos, Inmigracià ³n està ¡ en su derecho de prohibir la entrada del extranjero, por mucha visa que tenga. Y es que es muy importante entender que para obtener la aprobacià ³n de una visa no inmigrante, como es la de turista, o su renovacià ³n o la garantà ­a de ser admitido al llegar a un control migratorio de los Estados Unidos es necesario ser, en todo momento, elegible para la visa y admisible para ingresar a USA. Estas son  20 causas que convierten a una persona en inelegible  y estas son  22 que la convierten en inadmisible.  ¿Quà © pasa si migracià ³n  no aprueba el ajuste de estatus por matrimonio? Es muy raro que el Servicio de Inmigracià ³n y Ciudadanà ­a (USCIS, por sus siglas en inglà ©s) niegue la aprobacià ³n del I-130, es decir, la parte inicial de la tramitacià ³n donde realmente lo à ºnico que se confirma es que el que pide es un ciudadano y està ¡ casado legalmente con la persona pedida. Nada mà ¡s. El problema surge en ajuste de estatus. Las razones pueden ser muy variadas. Por ejemplo, que se considere que se ingresà ³ a Estados Unidos con la intencià ³n de casarse. Eso puede ser considerado un fraude de ley, ya que implica una mentira cuando se solicità ³ la visa de turista o cuando se cumplimentà ³ la ESTA. Otro problema es cuando se considera que el matrimonio es falso y su à ºnica finalidad es que el cà ³nyuge extranjero obtenga asà ­ los papeles. Esto puede dar lugar a castigos legales, ademà ¡s de no aprobarse la green card. Cabe destacar que, en la actualidad, la negacià ³n de un ajuste de estatus por parte de USCIS es una prioridad para la deportacià ³n. Finalmente, puede negarse la tarjeta de residencia por cualquiera de estas mà ¡s de 40 razones que aplican a todos los casos de solicitudes de residencia. Demoras en la tramitacià ³n de los papeles Aunque las peticiones de green card por matrimonio con ciudadano se encuentran entre las mà ¡s rà ¡pidas, lo cierto es que pueden demorarse varios meses. Es posible aprender cà ³mo verificarlo. Opciones migratorias para pedir al novio o cà ³nyuge En primer lugar, si la pareja no està ¡ casada, el estadounidense puede solicitar una visa de prometido o de novia cuando à ©ste todavà ­a no està ¡ en los Estados Unidos y que es  conocida como K-1. Con esta visa podrà ¡n entrar al paà ­s los prometidos y los hijos de estos. En los casos en los que un ciudadano està ¡ casado con un extranjero y à ©ste està ¡ fuera de los Estados Unidos puede pedirlo mediante un I-130 y luego un procedimiento consular o, en casos muy especà ­ficos puede merecer la pena solicitar una visa K-3, pero es recomendable consultarlo con un abogado migratorio. Por à ºltimo, si el ciudadano vive fuera de los Estados Unidos y està ¡ casado con un extranjero y deciden mudarse a USA tener en cuenta que pueden surgir problemas a la hora de probar ingresos. Asesorarse antes de iniciar los trà ¡mites. Informacià ³n relevante para evitar problemas Para evitar problemas es fundamental estar informado. Este test sobre visas de turista contiene informacià ³n esencial sobre cà ³mo obtenerla y cà ³mo conservarla. Este otro, sobre la autorizacià ³n que se  conoce como ESTA para los ciudadanos de paà ­ses que pueden viajar sin visa. Asimismo, este sobre la tarjeta de residencia permite tener claros puntos fundamentales para obtenerla y para conservarla. Finalmente, tener en cuenta que la informacià ³n de este artà ­culo no aplica a los extranjeros que ingresan ilegalmente en Estados Unidos, ya que no podrà ­an ajustar su estatus por matrimonio con ciudadano. Y en el caso de matrimonio con residente permanente es siempre requisito imprescindible que se està © legalmente en el paà ­s para poder ajustar su estatus. No serà ¡ posible tanto si se entrà ³ ilegalmente como si se ingresà ³ con visa y se quedà ³ mà ¡s tiempo del permitido. Este artà ­culo es informativo. No constituye consejo legal para ningà ºn caso concreto.